Como os anticipamos ayer, hoy ha prestado declaración la inspectora de Hacienda María Teresa Yabar Sterling, aunque continuará declarando los próximos días 8 y 9 de marzo.
Los que estábamos en la sala, no dábamos crédito a las declaraciones de esta señora, a la que debemos la situación en la que nos encontramos. Tristeza, de ver cómo la señora que nos arruinó la vida, se reía de los sellos cómo si de una experta filatélica se tratara y todo, porque de pequeña coleccionaba sellos.
A continuación podéis leer la crónica de Mercado de Dinero y las impresiones de Mila que también se encontraba en la sala y no difieren mucho del resto de asistentes hoy a la Audiencia Nacional.
Crónica de Mercado de Dinero a quién damos las gracias por el seguimiento diario que realiza cada día.
La responsable de la intervención a Afinsa, María Teresa Yabar, testifica entre risas ante la Audiencia Nacional
A continuación las impresiones de Mila en el día de hoy.
Querid@s amig@s:
Hoy ha declarado la inspectora de Hacienda que elaboró el informe, causante de la ruina sobrevenida de medio millón de consumidores españoles (y portugueses, entre otras nacionalidades), cuyas actas se han mantenido abiertas hasta fechas recientes,
Desde antes de mi declaración como testigo, y en fechas posteriores, he mantenido un prudente silencio en Canal Afinsa - "perfil bajo" lo llamo yo-, porque habiendo declarado como testigo, eso es lo que aconseja un principio de prudencia.
Creo que mi declaración fue imparcial-juré hacerlo así-, equidistante y ajustada a la verdad (incluyó palabras documentadas por mi esposo Rafael, en las que acreditaba su conocimiento del negocio de Afinsa y qué significaba para él ser inversor en bienes tangibles, y cliente de dicha compañía). Así voy a seguir en días sucesivos. Serán -son- otros compañeros quienes continuarán escribiendo unas crónicas que relatan fielmente y con todo lujo de detalles lo que está sucediendo en la A.N., en cada una de las comparecencias de testigos, acusaciones particulares, defensas, jueces, ministerio público -es decir, fiscal- y Abogacía del Estado.
Sin embargo, hoy, tras la declaración de Yábar Sterling, me permito hacer una excepción para trasladaros, brevemente, lo que yo he sentido durante la comparecencia de esta inspectora de Hacienda si bien me ahorraré el relato pormenorizado de los hechos (jamás podría superar las crónicas de Eduardo Berbis).
Es breve y se resume en lo siguiente: apenas habría transcurrido una hora de declaración cuando, llegado un momento, he tenido que abandonar la Sala, dirección a la sala de espera, hecha un mar de lágrimas. ¿El motivo? Uno muy simple: un instante de reflexión que me golpeó como un mazazo, en el que me vi mi misma preguntándome: "Pero como, Dios mío, es posible, que esta mujer haya sido la causante de la ruina de cientos de miles de ciudadanos españoles? ¿Cómo ha podido suceder semejante despropósito? ¿Qué le indujo realmente esta inspectora a hacer lo que hizo. ¿Cómo, después de escuchar lo que estoy escuchando y ver lo que estoy viendo, hemos podido llegar a esta situación?
Para quienes no habéis asistido a la vista, esto puede parecer un simple "bajón emocional". Para los compañeros que han escuchado como yo, desde la perplejidad y la indignación, lo que la inspectora iba relatando, cómo lo relataba y los argumentos en los que se ha basado para llevar a cabo las actuaciones llevadas a cabo, os aseguro que la cosa se ve de muy distinta manera y el asunto no es para nada menor. Serán ellos quienes os trasladen sus impresiones que, sin embargo, no serán, ni por asomo y por muy bien que estén escritas -que lo estarán- reflejo de la realidad.
Estas son las mias: : sus risas incontenibles, sus ironías, sus "esto es lo que me dijeron pero no puedo decir quién me lo dijo", sus suposiciones, -"elucubraciones", las llamó ella en otra declaración ante el juez, hace años- su "conocimiento del mundo de la filatelia porque ella de pequeñita coleccionaba sellos; sus..., sus..., sus... que mejor me callo....Todo, absolutamente todo, me tiene a las 16:40 de la tarde, absolutameante estremecida. Sigo sin dar crédito a lo vivido, en primera persona, en la mañana del día de hoy.
Pero eso si. El infame "El Economista" ya tiene sus titulares (¡¡quién desde la Sala habrá enviado esta crónica!! No tendrá un par para identificarse el próximo día y decirnos al público presente: "yo lo escribí").
¡¡Malditos sean mil veces quienes nos han llevado a esta ruina, a este calvario, a la pérdida de nuestro patrimonio y al cierre de una empresa ejemplar, quién/quienes quiera/quieran que sean!! ¡¡Maldita sea mil veces la prensa carroñera: a.k.a. "El Economista", que han estado silentes -y ausentes- para enviar crónicas desde la Sala del juicio antes de que declarara la inspectora, y que hoy sirven estos titulares en bandeja, para hacerle el juego sucio a los mamporreros que les dictan lo que tienen que escribir, y maldito/a sea mil veces la persona que haya enviado esta crónica desde la Sala, para ser reproducida, porque él -o ella- ha presenciado exactamente lo mismo que hemos presenciado los demás, y sabe que todo lo que se refleja en el artículo está descontextualizado y no obecede -en absoluto- a una fiel realidad.
Amigos, esto es más de lo que, llegados a este punto, y después de diez años de pérdidas personales, y materiales, sufrimiento, lucha, desgaste y dolor, se puede soportar.
(Opinión - Mila Hernán).
P.D. Y si alguno pone en duda lo que estoy diciendo, y quiere escucharlo en "vivo y en directo", no tiene más que acercarse el martes y el miércoles de la semana que viene, y asistir a la Sesión, puesto que la audiencia es pública.
P.D. Y si alguno pone en duda lo que estoy diciendo, y quiere escucharlo en "vivo y en directo", no tiene más que acercarse el martes y el miércoles de la semana que viene, y asistir a la Sesión, puesto que la audiencia es pública.