Cuando falta menos de un mes para que se cumplan diez años de las inmotivadas, desproporcionadas y vergonzosas intervenciones de Afinsa y
de Fórum Filatélico, después de más de treinta sesiones del juicio oral de
Afinsa (Penal), vemos con intranquilidad que el Tribunal está suspendiendo
sesiones (31 de marzo, 12 y 13 de abril de momento) y lo más inquietante,
declaraciones de testigos que podrían aportar, aún más si cabe, claridad al
procedimiento.
Las sesiones del juicio oral de Afinsa que tienen
lugar en la sala de lo penal de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares, están
poniendo de manifiesto que, lo que parecía, antes de iniciarse, un “paseo” para
la fiscalía y para los que de forma interesada y torticera fueron los artífices
de la intervención, se ha convertido, en un quebradero de cabeza para el
Tribunal.
El resultado de lo hasta ahora visto
en las sesiones puede resumirse en las siguientes frases: “Afinsa no debió ser intervenida” y “La actividad de Afinsa era legal”.
Lo que el Tribunal deberá juzgar, no serán diatribas,
elucubraciones, vaguedades, opiniones, falta de rigor en las explicaciones, etc.
Tendrá que tener en cuenta las irregularidades e ilegalidades que las
instituciones del Estado han realizado, en base a los hechos y
evidencias que se han puesto de manifiesto en el propio juicio. No valen los indicios endebles y el
Tribunal lo sabe, como también sabe que ahora estamos ante penas de cárcel
y eso son palabras mayores.
No se debe
condenar a ninguno de los antiguos administradores de Afinsa si no se tiene
nada contra ellos. Y, hasta ahora, no se tiene.
Por más que se
empeñen, el Estado tendrá, en algún momento, que responder de los daños producidos
a 190.022 víctimas por la inmotivada intervención de Afinsa.
Ahora que tanto se habla de regeneración, política,
económica, judicial e informativa, sería deseable que en el ámbito judicial se
pusieran, de una vez por todas, las bases para llegar a tener en España una
justicia independiente, imparcial, objetiva, digna y por tanto justa.
En esta tesitura, queremos
que el Tribunal aplique la LEY
(con mayúsculas), ¿O se sumará a las sentencias que sonrojarían al más avezado
jurista o magistrado?
VOLVERAN A LAS
ANDADAS,
como por ejemplo, el Juez Pedraz en su
lamentable instrucción y el juez Vaquer en permanente contradicción, dicho sea
con el debido respeto o juzgaran debidamente, con rigor y con justicia, a pesar
de …………
La regeneración
Judicial sería un hecho y los investigados y las 190.022 víctimas tendríamos
por fin JUSTICIA.